Cuando cierro mis ojos

Cuando cierro mis ojos,
Brotan lagrimas de sangre que manchan mis manos
Y tiñen mis ropas de un rojo carmesí profuso,
Nadie las ve.

Cuando cierro mis ojos,
El dulce sollozo de un alma en pena se escucha por la habitación,
Tristes y agónicos lamentos de un sufrimiento inamovible,
Nadie lo escucha.

Cuando cierro mis ojos,
Un escalofrío comparable al frio de un cementerio en invierno recorre
Mi piel y mis entrañas, congela mi voluntad y deseos,
Nadie lo siente.

Cuando cierro mis ojos,
Percibo el sabor de mis propias cenizas dentro de una urna,
Sabor a muerte, sabor a perdida total, sabor a sueño eterno,
Nadie lo puede degustar,

Cuando cierro mis ojos,
Llega a mi el aroma de una tumba en cuyo interior yace un cuerpo sin vida,
Cuerpo que es tragado por parasitos y convertido en nada, aroma a muerte,
Nadie lo percibe.

Cuando cierro mis ojos,
Vienen a mi mente las imagenes mas tenebrosas y aterrantes,
Imagenes de sufrimiento y desolación, un bebe llora abandonado por su madre.

Una pareja rompe su relacion por motivos mortales, un hombre agoniza por inanición, una anciana se arrastra por el suelo, sus huesos se notan aun sobre sus ropas.

Una iglesia se quema con tres niños en su interior, un Clérigo canta alabanzas a su Dios que le ha abandonado, los paganos danzan al rededor de un montón de cadáveres putrefactos sin cabeza.

Dos niñas entregan su amor a un hombre, vestidas como prostitutas, son aun unas tiernas bebés, aunque sus cuerpos digan lo contrario, un mes despues abortan un feto cada una, mismo que sirve de alimento para un pederasta.

Un asaltante despoja de sus bienes a un hombre sin manos que se tira al suelo a llorar, una manada de perros callejeros se tragan entre si a falta de alimento.

Un joven que no trabaja ni estudia, inhala sustancias que pudren su cerebro e inyecta otras que le dan placer, mientras muere desangrado en una avenida transitada donde nadie lo nota y sus intestinos de deshacen.

Mi angel de amor me deja en medio de todos estos sucesos, sale volando por la ventana y deja de amarme, me abandona a mi suerte, cuando cierro mis ojos, cada pestañeo, cada noche, cada despertar, cada suspiro, nade lo imagina.